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La teoría del desarrollo cognitivo de Piaget propone tres sistemas cognitivos (Piaget, 1995) que explican el surgimiento del pensamiento operatorio. Estos tres sistemas cognitivos asimiladores no solo explican cómo evoluciona nuestro pensamiento a lo largo del tiempo, sino que también proporcionan un marco para entender cómo el sentido de nuestra identidad se desarrolla y cambia a medida que crecemos y nos adaptamos a nuevas experiencias y perspectivas.
Antes de profundizar en estos tres sistemas cognitivos, es importante entender dos conceptos clave de la teoría de Piaget: la asimilación y la acomodación (Piaget, 2003). Estos procesos describen el intercambio funcional entre el individuo y su entorno, y son fundamentales para la evolución del pensamiento y la formación de la identidad individual y grupal.
Asimilación y acomodación
La asimilación se refiere al proceso mediante el cual el individuo incorpora nueva información y experiencias en sus esquemas mentales ya existentes. Es decir, cómo se adapta la información del exterior al interior del sujeto. Por ejemplo, una moneda puede servir para comprar, o el sujeto puede transformar su función, ya no para comprar algo sino por la función de guardarla como de colección, es decir transforma funcionalmente al objeto. Por otro lado, la acomodación es el ajuste de los esquemas mentales del individuo para acomodar nueva información que no encaja en los esquemas existentes. En otras palabras, es cómo se modifican las estructuras del sujeto para adaptarse a la realidad exterior. Por ejemplo, si tenías solo monedas de colección chicas y medianas y has conseguido una grande, ahora tu colección deberá incluir también ese tipo de monedas, es decir modificaste el como las ordenabas (la estructura) para acomodar la moneda grande. Estos dos procesos, asimilación y acomodación, trabajan juntos y están presentes a lo largo del desarrollo cognitivo.
Pensamiento individual
En la construcción del sentido de identidad individual
1. Asimilación práctica: Se refiere a cómo los individuos transforman la realidad exterior a través de sus esquemas de acción sensoriomotora. En el contexto de la formación de la identidad individual, este sistema cognitivo puede ilustrarse con la elección de las preferencias de un niño. Por ejemplo, a un niño le puede gustar el sabor dulce de ciertos alimentos y rechazar los amargos, lo que afectará sus decisiones ante la mera presencia de los alimentos y formará parte de su identidad individual.
Problemática social: Si un niño se vuelve muy selectivo con los alimentos basado en sus preferencias tempranas, puede rechazar compartir o probar alimentos durante eventos sociales, lo que puede llevar a la exclusión o la tensión social.
2. Asimilación representacional: Este sistema cognitivo es más egocéntrico y se refiere a cómo los individuos interiorizan las acciones aisladas y las utilizan para interpretar el mundo. Un ejemplo claro de esto es cuando un niño interactúa con su mascota y otros perros. En un principio, si el niño tiene un perro amable en casa al que acaricia y juega, tiende a asumir que todos los perros son amigables y les gusta ser acariciados. Sin embargo, cuando se encuentra con un perro agresivo, tiene que adaptar su comportamiento, aprendiendo a interiorizar una nueva acción: alejarse si el perro muestra signos de agresividad. Este proceso de adaptación a nuevas situaciones y la interiorización de nuevas acciones basadas en experiencias previas es un ejemplo de asimilación representacional y juega un papel crucial en el desarrollo de la capacidad de un individuo para interpretar e interactuar con el mundo a su alrededor.
Problemática social: Si un niño interpreta todas las interacciones con perros basándose en su experiencia con su propia mascota amigable, puede enfrentarse a situaciones de riesgo con perros desconocidos. Además, su percepción errónea puede provocar situaciones sociales tensas cuando difunde información incorrecta o incluso anima a otros niños a interactuar de manera insegura con perros desconocidos.
3. Asimilación operatoria: Aquí, el individuo empieza a sistematizar y a coordinar las acciones mediante una descentralización respecto al yo y las nociones subjetivas. Esto se manifiesta, por ejemplo, cuando un niño comienza a entender relaciones lógicas y a ubicarse en relación con los demás. Si un niño se da cuenta de que es más bajo que su compañero, ya está realizando una operación lógica de comparación sobre una representación (la altura) y una descentración que contribuye a su autoconocimiento y formación de su identidad individual.
Problemática social: Un niño que se da cuenta de que es más bajo que sus compañeros pueden desarrollar comportamientos de intimidación hacia los niños más altos como una forma de compensar su percepción de inferioridad. Este comportamiento puede alterar la dinámica social en el aula, provocando conflictos y exclusión.
Pensamiento sociocéntrico
En la construcción del sentido de identidad grupal
La teoría del desarrollo cognitivo de Piaget proporciona también una dimensión social enriquecedora para entender la formación de la identidad grupal a través de la lente de los sistemas cognitivos sociales. Estos tres sistemas cognitivos sociales, que son la contraparte paralela grupal de los sistemas cognitivos individuales en la perspectiva de Piaget, no solo explican cómo evoluciona nuestro pensamiento colectivo a lo largo del tiempo, sino que también proporcionan un marco para entender cómo nuestra identidad grupal se desarrolla y cambia a medida que crecemos y nos adaptamos a nuevas experiencias y perspectivas.
Los tres sistemas cognitivos del pensamiento en la construcción del sentido de identidad grupal son:
1. Asimilación técnica: Se refiere a cómo los grupos transforman la realidad exterior a través de sus esquemas de acción colectiva. Estas técnicas están vinculadas al trabajo material y a las acciones que el grupo realiza sobre la naturaleza. La entrada en la conciencia de estas técnicas es parcial, ya que están vinculadas a los resultados obtenidos y no tienen relación directa con la comprensión de las conexiones mismas. Por ejemplo, una comunidad que se dedica a la pesca desarrollará técnicas específicas para capturar peces. Estas técnicas formarán parte de la identidad del grupo y afectarán la forma en que la comunidad interactúa con el mundo marino.
Problemática social: Una comunidad que se dedica a la pesca puede agotar los recursos pesqueros si no emplea técnicas de pesca sostenibles. Esto puede desencadenar conflictos con otras comunidades que también dependen de los mismos recursos pesqueros, dando lugar a problemas de cooperación y conservación a nivel social y ambiental.
2. Asimilación ideológica especulativa: Este sistema cognitivo es más sociocéntrico y se refiere a cómo los grupos interiorizan las acciones colectivas y las utilizan para interpretar el mundo. Estas ideologías, que proceden de la simple especulación, pueden ser de todo tipo, desde cosmogónicas o teológicas hasta políticas o metafísicas. Un ejemplo de esto puede ser una sociedad que tiene un sistema de creencias religiosas compartidas. Este sistema de creencias no solo influye en cómo la sociedad interpreta el mundo, sino que también forma una parte integral de la identidad grupal, como una comunidad que se caracteriza por no consumir cierta comida en fechas específicas, seguir una serie de normas, etc.
Problemática social: La resistencia a adaptar o cambiar creencias y normas establecidas puede llevar a la marginación o exclusión de individuos que no se ajustan a las creencias del grupo. Este sistema de creencias puede crear divisiones y tensiones sociales, especialmente si estas normas no se actualizan en respuesta a nuevas informaciones o experiencias contradictorias.
3. Asimilación científica: Aquí, el grupo empieza a sistematizar y a coordinar las acciones mediante una descentración respecto a la propia sociedad y las nociones subjetivas. Esta asimilación se basa en la comprensión de las relaciones y reemplaza la acción concreta con acciones interiorizadas y técnicas que son las operaciones de cálculo, deducción y explicación. Por ejemplo, una comunidad puede darse cuenta de que sus prácticas agrícolas son perjudiciales para el medio ambiente en comparación con otras comunidades. Este reconocimiento puede llevar a la comunidad a cambiar sus prácticas, lo que constituye una operación lógica de comparación y una descentración que contribuye a su autoconocimiento y a la formación de su identidad grupal.
Problemática social: La resistencia al cambio, incluso frente a la evidencia de que las prácticas agrícolas actuales son perjudiciales para el medio ambiente, puede llevar a conflictos con grupos externos que buscan la sostenibilidad ambiental. Esto puede generar tensiones sociales y posiblemente legales, y causar un impacto negativo en la reputación de la comunidad a nivel más amplio.
Piaget, J., Campbell, R., & Emler, N. (1995). Sociological studies. Psychology Press.
Piaget, J. (2003). The psychology of intelligence. Routledge
